GESTION
EMPRESA FAMILIAR

Diagnóstico del riesgo de continuidad del negocio
El 50% de las empresas familiares no sobreviven a la segunda generación, y sólo una de cada tres consigue hacerlo a la tercera generación.

Aunque las variables que intervienen en los procesos de transición generacional son varias y complicadas, una planificación realista y certera, partiendo de la situación y de una foto inicial nos va a permitir poner en marcha procesos que puedan facilitar ese traspaso en la gestión de padres a hijos/hermanos.

Un análisis profundo, viendo de qué forma ha ido evolucionando la compañía desde su fundación hasta la generación actual. Cómo ha incrementado su dimensión (tanto a nivel de “negocio” como de “miembros de la familia”), entrada de Directivos que no son de la familia, existencia de órganos de gobierno familia-empresa, si se ha preparado debidamente la sucesión, si existe un protocolo familiar, si se trata adecuadamente a los familiares que no están en la empresa, etc.

El análisis de estas variables nos permitirá ver la posición en la que se encuentra la familia en el negocio y nos ayudará tomar decisiones que den garantías de continuidad.

En ZITA CORP, tras analizar todas estas variables esenciales y tras recibir el feed-back de las personas clave que la Propiedad nos indique, realizaremos un diagnóstico que explique cual es la situación real de su empresa y si realmente existe un riesgo en continuar. También le daremos las recomendaciones  necesarias y le ayudaremos a reconducir aquellas variables que precisen mayor atención.


Planificación de la sucesión y del relevo generacional
Éste es tal vez el punto más crítico para toda familia empresaria y la principal causa de desaparición de Empresas Familiares si no se ha preparado debidamente; con el tiempo y consenso adecuados.

Evidentemente no es lo mismo el relevo de primera a segunda generación que el mismo proceso en compañías más longevas. No obstante, a la complejidad del proceso siempre se le añade la carga emocional y las inquietudes e incertidumbres que se despiertan en el predecesor, en el sucesor y en el resto de  los miembros de la familia.

Cuando hablamos de sucesión nunca hemos de olvidar que ésta afecta a tres áreas claramente diferenciadas: PROPIEDAD, GOBIERNO y GESTIÓN

En ZITA CORP, nos centramos en tres temas:

- Cesión de cargo del predecesor, su transición de poder, su paso a segundo plano y como gestiona su papel dentro del ámbito de la propiedad, su posible presencia, o no, en los órganos de Gobierno, y su salida de las labores de Gestión.

- Ayuda en la selección y formación del sucesor, monitorizando sus habilidades directivas y sus puntos fuertes y débiles que deben ser completados o perfilados.

- Armonía familiar: todo esto dentro de una situación armónica dentro de la familia, que no desvirtúe las relaciones afectivas de sus miembros.



Protocolo de Familia
Un Protocolo Familiar es un instrumento necesario para establecer las reglas básicas en la relación Familia-Empresa.

El mal uso y/o abuso de éste ha llevado a muchas familias a fracasar en la implantación del mismo.

El protocolo debe ser realizado a la medida de cada familia y debe servir para obtener la máxima cohesión y armonía entre los miembros de ésta. También debe ayudar a que las diferentes generaciones unifiquen sus valores y compartan la misma visión futura de la compañía.

Un buen protocolo disminuye los conflictos a la hora de plantear el relevo generacional, el acceso de familiares a la compañía, su retribución, las reglas de compra-venta de acciones... y ayuda a edificar una cultura de diálogo y mutuo entendimiento.

Aunque no responde a un contrato regulado por el derecho, como todo contrato, le son aplicables las normas legales de carácter imperativo y precisa de una correcta estructuración jurídica en temas mercantiles, civiles, fiscales y familiares.

Desde ZITA CORP trabajamos con la familia para ir consensuando los diferentes aspectos que estructurarán el Protocolo Familiar. Una vez éste está listo, acompañamos en la implantación del mismo y vigilamos que sea un documento vivo; que se adapte a la realidad presente tanto de la Familia como de la Empresa.


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